París de noche - Guía para conductores brasileños

Las luces de París

Quien piense que París es considerada la Ciudad de la Luz únicamente por su abundancia de bombillas o su trabajo pionero en electricidad se equivoca. Claro que, de noche, la ciudad cautiva con la belleza de su arquitectura, sus monumentos, sus avenidas y sus numerosos museos.

¿Pero de dónde viene este nombre? Así de simple: ¡de la Ilustración! ¿Quién no recuerda aquella clase de historia del instituto sobre la "luz de las ideas" tras el oscuro período de la Edad Media? En el siglo XVIII, los intelectuales intentaron explicar el universo mediante la razón y la ciencia, iluminando la mente humana con la filosofía. Por esta razón, París, una de las capitales europeas que albergó este movimiento, llegó a ser conocida como la Ciudad de la Luz. La invención de farolas con lámparas de aceite decorativas no hizo más que reforzar su fama a principios del siglo XX.

Ahora, en el siglo XXI, la iluminación parisina es diferente y sigue cautivando al mundo. La técnica de la electricidad se ha convertido en arte. Y por la noche, el espectáculo de luces transforma la capital napoleónica en una ciudad diferente. Los monumentos y símbolos arquitectónicos bajo los focos son un espectáculo imperdible, al igual que los numerosos jardines resplandecientes y fuentes.